Cultivada especialmente para ser utilizada como alimento, la avena es un cereal con altas propiedades nutritivas y dermocosméticas. Conocido desde siglos atrás, se la encuentra especialmente en zonas templadas de América del Norte y Europa. Actualmente muchos productos cosméticos incluyen la avena entre sus principales activos. Una de las ventajas es que puede ser utilizada en todo tipos de pieles, salvo que seas alérgica a la avena.
Especialmente recomendada para aquellas personas que sufren de dermatitis atópica y los bebés, la avena posee propiedades dermatológicas variadas.
Dos tipos diferentes de avena son utilizados en cosmética y ellas son: la Coloidal y la Rhealba. La primera de ellas, es una forma física especial de la harina de avena, especialmente recomendada para el tratamiento de pieles atópicas o secas por su alto contenido en vitaminas y oligoelementos. La Avena Rhealba tiene efectos emolientes y anti-irritante y es escogida entre más de 80 variedades, por sus excelentes propiedades.